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G. paraguayensis |
Graptopetalum paraguayensis (N.E. Br.) E. Walther
Suculenta con roseta de hojas de 15 cm a 20 cm.
Muy parecidas a Echeveria, con la que frecuentemente hibridiza.
Por sus escasas exigencias de mantenimiento es ideal para personas que disponen de poco tiempo.
Requiere grandes cantidades de luz, prefiriendo incluso el sol directo.
Si la planta está descolorida es que necesita luz; situar junto a una ventana.
Durante el invierno debe mantenerse alejada de las calefacciones, en un lugar fresco, entre 5ºC y 10ºC, para no alterar su reposo; mientras que en verano puede permanecer al exterior.
Buenos niveles de ventilación y manteniendo baja la humedad.
Compost específico para cactus o crasas, compuesto de arena y materia orgánica.
Regar abundantemente en verano y mantenerlas secas en invierno pero no en un ambiente totalmente árido
Al regar evitar que el agua moje las hojas, pues daña la capa cerosa que la recubre y podría pudrirse.
Si las hojas y tallos pierden turgencia puede ser por falta de agua.
Si en la base de la planta hay manchas oscuras es podredumbre por exceso de riego.
Abonar en la época de crecimiento con pequeñas dosis.
Si fuera necesario, efectuar el cambio a un tiesto algo mayor en primavera.
Excelente planta de colección.
Terra Nostra - Madreperla, G. paraguayenis